Reclamaciones de los supervivientes

del plan de pensiones profesional

Si el beneficiario de la pensión profesional fallece, el cónyuge del fallecido tiene derecho a recibir una pensión de viudedad. Sin embargo, el derecho de los supervivientes depende de ciertos factores. Dado que la pensión de viudedad y la pensión legal tienen un tratamiento prácticamente idéntico en la ley, también deben cumplirse condiciones similares para que la solicitud sea efectiva.

En primer lugar, el matrimonio debe haber durado al menos doce meses para que la persona viuda tenga derecho a la pequeña pensión de viudedad. Sólo se paga durante un máximo de dos años y comprende el 25 por ciento de la pensión profesional real. Para cumplir los requisitos de la pensión de viudedad elevada, el superviviente debe tener al menos 45 años o una reducción comprobable de la capacidad de ganancia. La pensión es entonces el 55% de la pensión profesional real. Además, los hijos supervivientes pueden tener derecho a una pensión de orfandad con cargo a la pensión profesional del progenitor fallecido. No obstante, es importante tener en cuenta que el importe total de la pensión de supervivencia abonada no puede superar el importe de la pensión profesional acordada.

Además, hay que tener en cuenta que en algunos casos de interés legítimo del empresario, la pensión de viudedad puede quedar excluida por determinadas cláusulas. Sin embargo, estas restricciones no deben constituir una desventaja irrazonable para el beneficiario de la pensión. Así, en una decisión histórica del Tribunal Federal del Trabajo (BAG, sentencia de 19 de febrero de 2019, 3 AZR 150/18), se declaró inadmisible una cláusula en la que se hacía depender la pensión de supervivencia de una existencia de diez años del matrimonio. 

El Tribunal Federal del Trabajo consideró que el plazo de diez años era arbitrario y que ponía en peligro la finalidad de la pensión de supervivencia. En el caso concreto, no tenía ninguna conexión intrínseca con la relación laboral. Según la jurisprudencia del Tribunal Federal del Trabajo, un período mínimo de matrimonio sólo es adecuado si sirve evidentemente para excluir una pensión de supervivencia para los denominados matrimonios con pensión. Estos matrimonios suelen celebrarse inmediatamente antes del fallecimiento previsto del cónyuge, principalmente para concederle prestaciones de jubilación.

En cambio, los tribunales han reconocido otras cláusulas restrictivas. Por ejemplo, la llamada cláusula de matrimonio tardío. Está permitido excluir la pensión de supervivencia si el matrimonio se celebra tardíamente. Este puede ser el caso si el matrimonio tiene lugar después del hecho asegurado o si el matrimonio tiene lugar después de los 62 años, siendo esta edad el límite de edad pertinente en el que debe comenzar la concesión de la pensión de vejez según el régimen de pensiones.

La posibilidad de una cláusula de desfase de edad y, por tanto, la exclusión de la pensión de viudedad sigue siendo reconocida legalmente si la diferencia de edad entre los cónyuges es de una magnitud excepcional. Sin embargo, al igual que con la cláusula de matrimonio tardío, la distancia elegida debe ser razonable y necesaria. Entre otras cosas, el Tribunal Federal del Trabajo ha confirmado la conveniencia en el caso de una diferencia de 15 años. También es posible reducir la cuantía de la pensión de supervivencia en un cinco por ciento cada año. 

Sin embargo, se discute cómo debe valorarse el caso si la diferencia de edad entre los cónyuges es de sólo diez años. La hipótesis de una exclusión se ve respaldada por el hecho de que la diferencia de edad de diez años suele superar considerablemente la diferencia habitual. Además, en el caso que nos ocupa, es de esperar que con tal diferencia de edad, los cónyuges ya hayan estructurado su vida de tal manera que uno de ellos pase parte de su vida sin el otro.